En el mes de septiembre de 1959, luego del triunfo revolucionario, se decide reubicar el edificio en la Plaza Cívica (hoy Plaza de la Revolución) donde ya se habían instalado el Tribunal de Cuentas en 1953, el Ministerio de Comunicaciones en 1956 y el Palacio de Justicia, casi terminado al triunfo de la Revolución.